Para poder definir las rocas magmáticas se suelen utilizar dos características básicas, una es la textura y otra es la estructura. La más destacable es la textura y explicaremos qué es:
La textura es la disposición, el tamaño y la forma que presentan sus granos o cristales. En el caso de una roca magmática esta textura dependerá de lo rápido que se ha enfriado el magma y de la naturaleza del propio magma. Si el proceso de cristalización ha sido lento, le habrá dado tiempo a que los cristales se desarrollen y formen por completo, y a la inversa ocurrirá con enfriamientos muy rápidos en los que los cristales no estén bien formados (o incluso no lleguen a formarse). Estas condiciones a su vez dependerán de la zona en que se de dicho enfriamiento.
Posteriormente haremos los ejercicios 18 y 19.